domingo, 30 de noviembre de 2008

flamae amoris extinguantur

¿qué pasa cuando uno está enamorado?
¿por qué queremos estarlo?
puede que nos produzca tranquilidad, o puede que lo contrario.
a algunos nos gusta la lucha constante de intentar que nuestra mente gane a nuestro corazón.
a mi me gusta pensar que el corazón lo tengo para que me bombee la sangre pero si alguien no me quiere o me hace daño se me rompe en mil pedazos.
aún así he descubierto que sigue bombeando la sangre pero me impide sonreir.
me alegra poder sufrir a veces, otras veces sufro por no estar alegre más tiempo.
pierdo el tiempo pensando o soñando despierta. me digo que esas cosas no me las puedo permitir, por mi propio bien, pero a los diez minutos vuelvo a las andadas inventando un universo paralelo en el que todo pese a ser igual de difícil, acaba bien.
qué absurdo todo.
al final el amor es lo más absurdo del mundo. es como si nos clavaramos cuchillos en el corazón.
es atentar contra nosotros. es tirarnos un cocktail molotov en toda la cara.
aunque suene fatal yo me rindo.
me rindo a las mentiras, a las contradicciones, a el tiempo perdido, a las ganas de llorar, a el recuerdo del tacto de la piel......a tomar por el culo, aunque suene fatal...
pasa que te quiero tanto que voy a ser invisible por un tiempo....ya que mi rabia es mayor que mi tristeza.

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